A pesar del estancamiento económico mundial, causado principalmente por la pandemia y la guerra de Ucrania, las remesas de dinero por Internet siguen creciendo. Para 2022, según el Banco Mundial, se ha producido un aumento del 5% en el envío de dinero de un país a otro a través de sitios web y aplicaciones. América Latina sigue encabezando la cola de las remesas online, con un crecimiento estimado de los flujos del 9,3% el año pasado.
Las remesas siempre han sido una forma importante de transferencia de ingresos entre países, sobre todo entre quienes tienen familiares o amigos viviendo en el extranjero o personas que emigran a países más ricos con el objetivo de regresar a sus países de origen tras unos años de trabajo. Sin embargo, el proceso de envío de dinero a través de las remesas tradicionales solía ser caro, lento y complicado. En los últimos años, los avances tecnológicos del sector han permitido desarrollar soluciones más rápidas y asequibles, lo que puede explicar el crecimiento del volumen de las remesas internacionales en los últimos tiempos.
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Pero también hay otros factores, como la globalización y la popularización del trabajo a distancia, que permite viajar más y ganar en otras monedas. El profesor e investigador de economía de la Universidad Libre de Berlín, Christian Ambrosius, explica que las remesas son especialmente importantes para las familias de bajos ingresos cuando se produce algún tipo de situación de emergencia, conflictos o tragedias naturales.
«Puede tratarse de distintos tipos de emergencias, por ejemplo: quiebra económica del país, terremotos, inundaciones y otras catástrofes. Por tanto, las remesas son muy importantes para la estabilización y actúan como un seguro para las familias en situaciones en las que se ven muy afectadas económicamente.»
Christian Ambrosius. Profesor e investigador del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Libre de Berlín.
En México, la segunda economía de América Latina, el 25% de los hogares recibe remesas y el importe total de las remesas enviadas al país alcanzó una cifra récord en 2022, según anunció el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, llegando a 58.000 millones de dólares. La recepción de dinero a través de remesas del extranjero se concentra en las regiones más pobres, como el estado de Oaxaca, en el sur del país.
Ambrosius explica que hay que tener en cuenta que México tiene una población migrante muy numerosa que vive en Estados Unidos. Según el censo de población del Departamento de Trabajo de EEUU, alrededor del 27 por ciento de la población inmigrante del país es de origen mexicano. Ambrosius también señala que «algo que siempre importa es también el valor de las monedas, por lo que un dólar más fuerte, por ejemplo, genera la posibilidad de más remesas».
La misma lógica se aplica a los emigrantes de otros países latinoamericanos y ésta fue una de las razones que permitieron a Vanessa Mattos, de 28 años, ayudar a su familia en Brasil mientras hace un máster en Alemania. Vanessa trabaja en un restaurante para pagarse los estudios y afirma que la elevada devaluación del real frente al euro ha mejorado sus condiciones para mantener la ayuda económica a sus padres, que viven en el interior de Bahía. «Al principio, por 2020, el euro estaba más apreciado, por lo que podía enviar más dinero. Aún así, hoy no me veo ayudando a mis padres de la misma manera que ahora si estuviera en Brasil. No por ahora, en la situación económica que está».
La estudiante brasileña envía 100 euros (570,00 reales – tipo de cambio actual del euro comercial) al mes a sus padres. «Dependiendo de las facturas que tengan y de lo que necesiten, hago cuentas y envío. A veces más, a veces menos, porque también depende de cómo esté mi sueldo en el mes», dice Vanessa.
Las remesas en línea son una parte crucial del producto interior bruto de pequeños países latinoamericanos como Haití, Jamaica, Honduras y El Salvador. En Guatemala, las remesas alcanzan aproximadamente el 20% del PIB, después de las exportaciones y las inversiones extranjeras. Para unos seis millones de familias -de un total de 17 millones que reciben remesas- este dinero es la principal fuente de ingresos, según datos del Banco Mundial. En Nicaragua, la mitad de las remesas procedentes del extranjero representan el 60% de los ingresos de las familias receptoras y, de media, el 15% de los ingresos de los remitentes, según la organización Diálogo Interamericano.