Cuando se trata de historias de éxito de startups, Y Combinator (YC) tiene, sin dudas, el toque de Midas. La aceleradora con sede en Silicon Valley ha invertido en más de 3.000 startups desde que abrió sus puertas en 2005. Desde entonces, más de 60 empresas respaldadas por YC han alcanzado el estatus de unicornio, y el valor total de las empresas que salen de la aceleradora asciende ahora el US$ 1 billón.
A medida que las empresas globales de capital privado y los pesos pesados del capital de riesgo, como Advent International, Softbank y Tiger Global, empezaron a invertir millones de dólares en el ecosistema de las startups de América Latina, YC también aumentó su participación en inversiones de fase inicial en la región. América Latina es ahora la región del mundo donde más rápido crece la inversión en startups. Y según datos recientes de Crunchbase, Y Combinator es, por lejos, la empresa más activa en inversiones semilla en América Latina, habiendo participado en más de 60 inversiones sólo en 2021.
La semana pasada, YC publicó una actualización de su lista de las principales empresas – una clasificación semestral de empresas de su cartera con valoraciones de más de US$ 150 millones. Ocho exalumnos de América Latina han alcanzado este hito hasta el momento, con la colombiana Rappi encabezando la tabla de clasificación en el puesto 21 entre las 260 empresas clasificadas. Las brasileñas Belvo y Kovi y las chilenas Fintual y Houm entraron en la lista por primera vez, junto con las recién llegadas Fondeadora y Nowports, de México.
El enfoque Y Combinator
YC mantiene una cartera global repleta de fundadores talentosos, y lo hace a través de su programa de aceleración, que se desarrolla dos veces al año. La empresa recibe más de 30.000 solicitudes al año y sólo acepta un 2% de las startups, o sea, unas 400 startups por “lote”. Los fundadores seleccionados para el programa YC reciben US$ 500.000 de financiación inicial y pasan tres meses en una intensa colaboración con socios y consultores.
YC ofrece una gran cantidad de aprendizaje y networking empresarial en un corto período de tiempo. Se alienta a los participantes a reunirse con sus asesores y mentores cada vez que deseen discutir los problemas estratégicos, tácticos y técnicos a los que se enfrenta cada startup. Los participantes tienen también la ventaja adicional de tener acceso directo a los exalumnos de YC y son invitados a charlas semanales off-the-record con otros fundadores e inversores exitosos. El programa también incluye campos de entrenamiento especiales realizados por expertos del sector sobre temas fundamentales para el éxito de una startup, como las ventas y el crecimiento.
Lo que es más importante, los participantes de YC aprenden a presentar de manera eficaz sus startups a los inversores y a cerrar un trato después de haber despertado su interés. Cada programa de tres meses finaliza con el Demo Day, en el que los fundadores presentan sus empresas a posibles inversores, que pueden ayudar a respaldar la siguiente fase de crecimiento de las startups.
LEE TAMBIÉN: Private Equity: la tesis de Advent en América Latina
LABS habló recientemente con Stephanie Simon, jefa de admisiones de Y Combinator, para obtener más información sobre el famoso programa de aceleración y lo que se avecina en el horizonte de las inversiones en América Latina.

Bonny Renner: ¿Qué es lo que hace que los fundadores y las startups sean atractivos para YC?
Stephanie Simon: Nos interesamos por startups de cualquier campo, y financiamos empresas que fabrican de todo, desde microbios hasta reactores de fusión para aviones supersónicos. En cuanto a lo que buscamos en las solicitudes, nos gusta ver equipos con gran capacidad de construcción. A menudo, esto significa tener un fundador técnico, tener un historial de construcción o evidencia de que puede construir un equipo increíble a su alrededor para ayudar con la ejecución. Al construir un negocio en un sector altamente regulado, como los servicios financieros, es útil tener algún conocimiento del dominio.
BR: ¿Qué puede decir sobre la calidad de las startups latinoamericanas que se presentan al programa de aceleración de YC? ¿Tienen equipos y liderazgo fuertes?
SS: Cuando decidimos financiar una startup, lo que más nos interesa es el equipo, específicamente sus habilidades técnicas. Buscamos ideas que puedan convertirse en grandes empresas si el negocio tiene éxito, pero esto es secundario frente a las cualidades de liderazgo de los fundadores.
Hemos visto un número cada vez mayor de solicitudes de fundadores para el programa de YC en América del Sur. Lo que es aún más significativo es que el calibre de los equipos latinoamericanos que se postulan sigue aumentando. En 2019, financiamos 22 empresas en América Latina. En 2020 financiamos 30. Y en 2021, 83
Stephanie Simon, jefa de admisiones en Y Combinator.
Hemos constatado que cuando financiamos empresas exitosas como Brex y Rappi, hay un efecto dominó que inspira a otros a crear sus propios negocios, y lo estamos viendo en América Latina. Creemos que la distancia provocada por la pandemia contribuyó a aumentar el interés. Los fundadores que tal vez no pudieron mudarse temporalmente [a California] durante tres meses, algo que requeríamos anteriormente, ahora se están postulando en Y Combinator.
BR: ¿Algún sector en específico se destaca en los candidatos que vienen de América Latina?
SS: Alrededor del 40% de las empresas que financiamos en América Latina están en el segmento fintech, lo cual no es sorprendente. Hay una enorme demanda de servicios financieros en la región – faltan servicios, grandes sectores de la población no tienen una cuenta bancaria, más empresas se conectan en línea y utilizan pagos digitales, etc.
LEE TAMBIÉN:
BR: ¿Qué necesita América Latina para respaldar una cartera estable de startups?
SS: Las startups exitosas crean la demanda de un ecosistema saludable de startups, con sólidos programas de tecnología de la información, buenos inversores iniciales, API abiertas y más, lo que a su vez fomenta y apoya el espíritu empresarial.
BR: ¿Cómo está evolucionando la estrategia de financiamiento de YC y cuáles son los planes futuros para América Latina?
SS: En enero de 2022 implementamos un nuevo “acuerdo estándar” para nuestros fundadores. Cuando una empresa es aceptada en un programa YC, recibe US$ 500.000. De este total, seguimos invirtiendo US$ 125.000 a cambio del 7% de las empresas y ahora invertimos US$ 375.000 adicionales con una cláusula “NMF” (del inglés Most Favored Nation, que protege a los primeros inversionistas, al otorgarles los mismos derechos y beneficios que reciben los posteriores inversores, si estos derechos y beneficios son más favorables que los originalmente acordados).
Antes, invertíamos US$ 125.000 por el 7% en la modalidad SAFE (del inglés simple agreement for future equity, que “bloquea” el porcentaje de la empresa que posee un inversionista, independientemente de acuerdos futuros).
Hemos estado invirtiendo en rondas iniciales para nuestros exalumnos desde 2015. Se trata de empresas de alto crecimiento que han recibido entre US$ 15 millones y US$ 300 millones o más en financiamiento de YC. Rappi es una de estas empresas, al igual que Brex.
En total, hemos financiado casi 200 empresas en América Latina y no tenemos planes de desacelerar. Creemos que hay talento en todo el mundo y nuestro objetivo es ayudar a los fundadores prometedores a construir empresas que cambien el mundo, sin importar dónde vivan
Stephanie Simon, jefa de admisiones en Y Combinator.
Traducido por Adelina Chaves